Tomado del Congreso Nacional Homeopatía.
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¿Qué es la Homeopatía?
La real
academia de la lengua define a la Homeopatía como: Un sistema curativo que
aplica a las enfermedades, en dosis mínimas, las mismas sustancias que en
mayores cantidades, producirían en el hombre sano síntomas iguales o parecidos
a los que se trata de combatir.
Como se
puede observar esta definición planteada de esta manera no ayuda mucho a
clarificar el interrogante, sobre todo a aquellos que no conoce su metodología y
que se acercan por primera vez a ella. Por tanto, preferimos responder a ésta
pregunta de la siguiente manera:
La
Homeopatía es un sistema médico terapéutico -ciencia y arte curar- basado en
principios y leyes naturales, que aborda al ser humano como un todo integral,
conformado por alma, mente, emociones, energía vital y cuerpo. Que
tiene bien claro que mientras el ser humano se encuentre en equilibrio, fluyendo armónicamente al ritmo de la existencia, prevalece en él, un estado
de bienestar que es lo que denominamos salud; pero al perderse éste equilibrio,
y estancarse su desarrollo y evolución, cae en un estado de desarmonía, que se
manifiesta a través de una serie de molestas perturbaciones, que comúnmente
llamamos enfermedad.
Para
restablecer la armonía y lograr la curación, la Homeopatía se rige por el
principio formulado en latín “SIMILIA SIMILIBUS CURENTUR” que traduce lo
semejante cura lo semejante o “ley de los similares” formulado por Hipócrates
(460 a 377 a.c) padre de la medicina, y que fue retomado, desarrollado y
perfeccionado por el médico Alemán Dr. Samuel Hahnemann.
Este
principio establece que si una sustancia cualquiera tiene el potencial de
producir síntomas patológicos en una persona sana, cuando es tomada en grandes
dosis o al utilizarla por un tiempo muy prolongado, ésta misma sustancia
también tiene el potencial de curar o eliminar las molestias que le sea
semejante en una persona enferma, siempre que dicha sustancia sea suministrada
en dosis mínimas o infinitesimales y haya sido sometida a unas vigorosas
agitaciones controladas, las cuales suelen denominarse, sucusiones.
La
finalidad que la Homeopatía persigue a través de su forma metodológica de
abordar al paciente es lograr la estimulación de la energía vital-natural,
ayudar a reencausar el equilibrio perdido y potenciar los mecanismos
intrínsecos de autocuración.
- Ejemplo
de la ley de la similitud.
En el
siglo XIX era costumbre de las mujeres alemanas tomar regularmente la hierba
valeriana como bebida estimulante. El abuso de esta práctica terminó por
afectarles “el sistema nervioso”. Produciéndoles fenómenos nerviosos e
histéricos además de diversas molestias hipocondríacas.
Todos
estos síntomas la Homeopatía los observó y analizó minuciosamente, luego los
sistematizó y corroboró en reiteradas oportunidades por medio del método de
experimentación pura. Llegando así a la conclusión, que la Valeriana oficcinalis produce bajo
condiciones experimentales estrictas y al mismo tiempo logra curar, entre otros
los siguientes síntomas:
Estados
de histeria con hipersensibilidad general y de los sentidos, excesiva
excitabilidad nerviosa, con temperamento muy cambiante e inestable,
alternancias muy marcadas de síntomas mentales totalmente opuestos, pasando de
la mayor alegría a la más profunda tristeza, de la suavidad y dulzura a la
mayor agresividad e irritabilidad; a menudo acompañándose todo esto de un gran
aflujo de pensamientos o ideas que parecen perseguirse unas a otras.
Todos
estos síntomas agrupados como resultados de la investigación y
experimentación, nos dan la seguridad a los homeópatas que cuando nos encontremos frente a una persona que presenta síntomas muy semejantes a los que hemos descrito, hipersensibilidad, temperamento cambiante, aflujo de pensamientos, etc. el procedimiento correcto es indicar Valeriana oficcinalis en dosis mínimas o infinitesimales, aunque ésta persona jamás la haya probado, y sus molestias procedan por otras causas.
experimentación, nos dan la seguridad a los homeópatas que cuando nos encontremos frente a una persona que presenta síntomas muy semejantes a los que hemos descrito, hipersensibilidad, temperamento cambiante, aflujo de pensamientos, etc. el procedimiento correcto es indicar Valeriana oficcinalis en dosis mínimas o infinitesimales, aunque ésta persona jamás la haya probado, y sus molestias procedan por otras causas.
Pues como reza la ley biológica-natural: lo
semejante es curado por lo semejante, lográndose así con unas cuantas dosis
Dinamizadas (dilusión + Sucusion) relajar el estado emocional alterado y
serenar la mente poniendo fin absoluto, al desequilibrio.
¿Cuáles
son las bases y principios de la homeopatía?
La
homeopatía está basada en cuatro principios fundamentales que la soportan:
El
principio fundamental sobre el cual se apoya la homeopatía, es el principio de
similitud. El Dr. Hahnemann en el siglo XVIII se da cuenta en sus repetidas
observaciones, que existen dos maneras básicas de curar, a través
de la ley de los opuestos y a través de la ley de los similares, hecho que
había sido planteado ya por Hipócrates, padre de la medicina, muchos siglos antes; de lo cual tenía pleno conocimiento y así recocía.
Este brillante médico Alemán, observa
que se puede tratar una enfermedad oponiéndose al síntoma, como por ejemplo
cuando se utilizan antiinflamatorios para tratar una inflamación. Esta es la
forma que utiliza la medicina convencional y se basa en mitigar o paliar el síntoma
mediante su supresión directa, actuando así solo en forma parcial.
Y de otra forma, la cual es curar por los similares, que es la que utiliza la Homeopatía, en
ésta, el medicamento actúa en la misma dirección que lo hace la enfermedad,
haciendo participar al organismo en la curación, mediante la estimulación
natural de todo el constructo vital del paciente. En este caso el medicamento
no se impone sobre el síntoma suprimiéndolo, si no que al despertar una
reacción de autocuración el síntoma desaparece debido a la acción concreta de
los mecanismos de autocuración que la persona posee, realizándose así un
tratamiento más profundo y completo.
2.
Principio de experimentación en el hombre sano:
El Dr. Hahnemann
al observar el fenómeno de la curación de la fiebre palúdica con la quinina
realizada por el Dr. Cullen, despertó su curiosidad científica y lo llevó a
experimentar en sí mismo con la quina y luego con varios medicamentos más.
Se dio
cuenta entonces, que los síntomas producidos experimentalmente en un hombre
sano, en este caso él mismo, eran los que el medicamento podía curar luego en
el enfermo.
Así es que la
quina (China oficcinalis), fue la primera sustancia que experimento en él mismo, esto lo animó para
seguir experimentando en él y luego en otros voluntarios, descubriendo así el
poder curativo de nuevos medicamentos, Esta labor fue continuada por otros
consagrados investigadores y en la actualidad ya se habla de mucho más de tres
mil medicamentos experimentados.
3.
Principio de la dosis infinitesimal:
En sus
experimentaciones con sustancias Hahnemann tuvo que ir disminuyendo la cantidad
o dosis ingerida para evitar los efectos nocivos de las mismas, y no poner en
riesgo su vida, la de sus amigos y la de todos los colaboradores que
participaban en sus ensayos. Para esto comenzó a diluirlas en agua tridestilada
cada vez más, hasta casi no quedar nada de ellas. Como el efecto de las
sustancias durante la experimentación eran cada vez más suaves y limitados
decidió además agitar el frasco con unos fuertes golpes o sucusiones para
lograr homogenizarlas, descubriendo, para su asombro que las sustancias
diluidas seguían teniendo efecto a pesar de las constantes diluciones, pero además
de esto, vio aparecer virtudes escondidas en las sustancias que se manifestaban
a través de los síntomas experimentales que incluían no solo los síntomas de la
esfera física sino también la esfera emocional y la mental.
Resumiendo, el Dr. Samuel Hahnemann había descubierto que diluyendo la sustancia disminuía su
concentración al mismo tiempo que sus efectos nocivos (propios de cada
sustancia, según concentración) y que además si los agitaba o sucusionaba, de
estos emergían nuevas propiedades curativas, que estaban ocultas en estado
crudo o natural.
Solo hasta ahora la física y química cuántica ha iniciado a explicar lo que la experiencia ya
viene confirmando desde hace más de 222 años. La acción de los medicamentos
homeopáticos no puede ser explicado por las leyes de la química y física
convencional. Los avances en la física y la revolución de todos los conceptos
sobre la materia, la energía y el espacio tiempo relativo sobre lo cual trabajó
Albert Einstein y sus sucesores, empiezan a darle sentido a un universo que
funciona de un modo inesperado y diferente a los razonamientos y creencias
habituales.
4.
Principio del medicamento único:
El Dr. Hahnemann
afirmaba categóricamente que, si la experimentación en el hombre sano se hacía
con un solo medicamento a la vez, para de ese modo conocer su acción particular
y específica sobre cada experimentador a través de los síntomas que producía esa patogenesia, también se debería prescribir un solo medicamento en la
consulta, cuando al tomar los síntomas del enfermo estos fueran similares al
del medicamento experimentado previamente en el experimentador sano.
De esta
manera se podía prescribir un medicamento en forma segura y efectiva.
Es así que la homeopatía se basa en la prescripción de un solo homemedicamento a la vez (en dosis única o repetida) y solo en casos extremadamente necesarios se recurre a la
utilización de un homeomedicamento como intercurrente.
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