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Introducción a la Homotoxicología
«Todos
aquellos procesos que nosotros hemos denominado enfermedades son,...la
expresión de medidas defensivas biológicamente necesarias contra homotoxinas
endógenas y exógenas...»
Hans-Heinrich
Reckeweg
El enfoque y tratamiento que la medicina
farmacológica convencional da a las enfermedades, acaba siendo, más temprano
que tarde, contraproducente en la mayoría de los casos, esto debido al daño
que genera en los diferentes sistemas enzimáticos y mecanismos de defensa del organismo. Es así
que los antibióticos, esteroides, antiinflamatorios, analgésicos,
tranquilizantes, etc., terminan alterando y bloqueando los mecanismos
enzimáticos, y desestabilizando el funcionamiento armónico natural de los
sistemas vitales.
A menudo los médicos y profesionales de la salud que
ejercen por el sistema convencional tienen claros estos efectos negativos, pero se ven
obligados a optar entre «la espada» la cual es la enfermedad y la «pared» que
son los efectos o resultados no deseados; todo ello, debido al desconocimiento
de métodos más adecuados para enfrentar
la enfermedad sin provocar un daño colateral.
Sin embargo, el desconocimiento de la ley no exime
de su cumplimiento, ni libra del castigo, Ignorantia
juris non excusat reza una antigua oración latina; ya que existen desde
hace mucho tiempo, opciones válidas como las que presentan las medicinas
biológicas con las cuales se obtienen iguales o mejores resultados a los
conseguidos con los tratamientos farmacológicos convencionales, sin los
desagradables inconvenientes que presentan
las drogas sintéticas y los tan comunes procedimientos invasivos.
El problema principal al cual nos enfrentamos, es en realidad, la dificultad o la negativa
de ciertas mentes cerradas y condicionadas (instituciones, gobernantes,
universidades, médicos, pacientes…etc.) a aceptar otros sistemas terapéuticos
con sus respectivas formas de curar, aunque estos hayan demostrado, no solo
durante años sino durante siglos, su
efectividad y validez. Todo esto con el perjuicio directo de la medicina en general; pero sobre todo del
paciente. Extendiéndose este daño a toda humanidad la cual como resultado de
reiteradas “supresiones” farmacológicas y quirúrgicas está perdiendo cada vez
más su capacidad de autoregeneración, autoarmonización, raciocinio y
discernimiento.
Es necesario entonces, comenzar a dar su justo lugar a cada sistema,
técnica o procedimiento médico, y lograr
jerarquizarlos según su respectivo campo de acción, teniendo como punto de
referencia la relación riesgo/ beneficio y costo/beneficio
Una postura científicamente correcta, no sería estar en contra de la medicina farmacológica
o convencional, o de la no convencional, o de esta o la otra; ya que en últimas
todas son medicina y tienen como finalidad
el objetivo de ayudar al ser doliente; lo adecuado sería estudiarlas y
conocerlas muy bien, pasa así recurrir a ellas -con pleno uso de
consciencia- en el momento preciso.
Partiendo siempre de aquellas más inofensivas como primera (o única) opción,
para solo llegar a las más invasivas como último recurso. Si podemos sacar a un
paciente de una patología con un tratamiento inocuo de forma rápida, segura y
económica para qué recurrir a métodos “supresivos”
e invasivos, cuyos efectos indeseables están más que claros.
Afortunadamente cada vez son más los profesionales
de la salud que logran romper con los condicionamientos impuestos por los
sistemas imperantes. Para ellos los que no se han dejado encadenar, es el
presente trabajo, con el cual se pretende aportar un grano de arena para que “la
salud del ser humano sea armoniosamente natural”.
ACLARACIONES Y RESPUESTAS A LAS PREGUNTAS FRECUENTES
·
¿Qué es la Medicina Biológica?
La medicina biológica es una rama de la medicina que aúna todas las
terapias encaminadas a favorecer y reforzar los mecanismos de curación del
hombre y de los seres vivos en general.
Enfoca al hombre como un todo, es decir, integrado por cuerpo, emociones
y mente; considerando que nadie está enfermo solo de un órgano o función, sino
que lo está de todo el sistema.
Esta forma de abordaje terapéutico
tiene como objetivo preservar y/o restablecer el equilibrio biológico
del paciente, a través de la capacidad intrínseca de defenderse naturalmente, ayudándole a que
se cure mediante la activación de su propio mecanismo de defensa y la
eliminación o inactivación de las sustancias nocivas.
·
¿Qué es la
Homotoxicología?
La Homotoxicología es una vertiente de la medicina biológica que estudia la acción de las homotoxínas en los procesos fisiológicos, y cómo su presencia genera un estado alterado de la salud al cual denominamos enfermedad. La Homotoxicología fue introducida en la medicina por el médico alemán Hans-Heinrich Reckeweg, quien en los años cuarenta redefinió lo que es la enfermedad.
Según el doctor alemán la
enfermedad es el estado en el cual el organismo, a través de un conjunto de
reacciones naturales (fiebre, diarrea, procesos inflamatorios, etc.), enfrenta
la acción de las homotoxinas -tanto endógenas como exógenas- con el fin de
eliminarlas y recobrar el estado de salud. Uno de sus méritos principales fue lograr unir los avances de las ciencias
médicas clásicas (biología molecular, fisiología, anatomía patológica, etc.)
con la extensa experiencia terapéutica lograda por la medicina homeopática.
·
¿Cómo se concibe la enfermedad desde la Homotoxicología?
Según la homotoxicología todos los procesos, estados y fenómenos
que denominamos enfermedades, no son más que la expresión o el reflejo de los
sistemas fisiológicos de defensa del organismo en su intento por defenderse de sustancias nocivas; es la lucha
por desactivar, eliminar y/o compensar el daño causado por
homotoxinas endógenas o exógenas para poder retornar
así, al estado de salud.
Por tanto, lo que denominamos "enfermedad" es el estado en el cual el organismo, a
través de un conjunto de reacciones naturales, respuesta adaptativa contenida en el programa Biológico Humano (fiebre, diarrea, procesos
inflamatorios, etc.), enfrenta la acción de las homotoxinas -tanto endógenas como exógenas- o bien el resultado de daños tóxicos que el
organismo trata de compensar, con el fin de restablecer, en lo posible, la
homeostasis.
·
¿Cómo es la terapéutica antihomotóxica de la Homotoxicología?
La terapia antihomotóxica de la homotoxicología, es un método
biológico-natural cuya peculiaridad radica en un programa especial de
medicamentos, con variadas formas farmacéuticas (gotas, comprimidos, pomadas,
colirios, nebulizadores, etc.) y un espectro directo de indicaciones, que logra
la estimulación de los mecanismos intrínsecos de autocuración. La
característica principal de esta terapia es la casi total ausencia de efectos
secundarios y /o iatrogénicos. Dada su
buena tolerancia ha demostrado ser un
método idóneo para afrontar tratamientos que requieran una larga duración.
En síntesis el tratamiento antihomotóxico busca:
1-
Eliminar las homotoxinas que se acumulan en el organismo y que están
perjudicándolo,
2- Reforzar los órganos y los tejidos que están debilitados, para su correcto funcionamiento,
3- Fortalecer el sistema inmunitario
2- Reforzar los órganos y los tejidos que están debilitados, para su correcto funcionamiento,
3- Fortalecer el sistema inmunitario
·
¿Qué es un medicamento antihomotóxico u homotoxicológico?
Los medicamentos antihomotóxicos son productos que han sido elaborados
bajo estrictas normas de fabricación, siguiendo los procedimientos homeopáticos
de las farmacopeas internacionales. Su objetivo terapéutico es la estimulación
y el favorecimiento de las reacciones y los mecanismos de defensa naturales del
organismo, mejorando así la función de los órganos y tejidos con capacidad de
detoxicación. Estos medicamentos cumplen la función de asistencia inmunológica, logrando: la regulación del sistema
inmunológico, desintoxicación o eliminación de toxinas de la matriz y la mejora
del funcionamiento de los órganos vitales.
·
¿En qué enfermedades sirve la homotoxicología?
La homotoxicología es beneficiosa en cualquier patología siendo de gran ayuda por tanto en cualquier rama médica: desde la pediatría hasta la geriatría, teniendo así una amplia gama de posibilidades terapeúticas. La medicina homotoxicológica, al inducir mecanismos de asistencia inmunológica, ofrece tratamientos efectivos que permiten detener, minimizar o revertir el avance de las enfermedades, lo cual es especialmente útil en patologías crónicas, terreno en el cual la medicina farmacológica o convencional, constantemente queda atada de brazos.
·
¿Tienen reacciones adversas los medicamentos antihomotóxicos?
Los medicamentos homotoxicológicos que produce y/o
distribuye Ser Humano Farmacia Médica Homeopática están elaborados
principalmente de mezclas de sustancias en dinamizaciones bajas o medias que
son muy seguras, que han sido sometidos durante décadas al rigor de pruebas toxicológicas,
farmacológicas, patogenéticas y clínicas. Los excipientes o vehículos que se
emplean en su preparación son ciento por ciento naturales, lo que permite
que sean asimilados fácilmente,
teniendo otra gran ventaja, ser
altamente efectivos sin producir
irritación de la mucosa gástrica u oral.
Principios
fundamentales de la Homotoxicología
·
Las
Homotoxinas
Las homotoxinas son todas aquellas sustancias e información nocivas
para el organismo del hombre (químicas, bioquímicas, físicas o
psíquicas). Es
así que no todas las sustancias e
informaciones nocivas y tóxicas tienen el mismo efecto sobre todos los seres
vivos, e incluso pueden no resultar tóxico en absoluto para alguna especie en
particular. Las homotoxinas pueden proceder de a fuera y se les llama homotoxinas exógenas o generarse en el propio organismo como
consecuencias de reacciones fisiológicas o patológicas, y se les denomina homotoxinas endógenas.
·
Homotoxinas exógenas y endógenas
Las homotoxinas exógenas son sustancias que por definición ya son tóxicas
para el organismo humano en ciertas situaciones. Algunas de ellas como: tabaco,
alcohol, drogas/fármacos; son bien conocidas. Otras como: colorantes,
sustancias aromáticas, edulcorantes alimentarios; son menos conocidas y otras como: cadmio, mercurio, evaporación
de pegamentos y pinturas, gases, radiaciones, etc.; no son conocidas en
absoluto.
Las homotoxinas endógenas son aquellas que
crea el propio cuerpo. En su
gran mayoría son productos
intermediarios o de desecho de procesos metabólicos (por ejemplo, CO2). Otras son consecuencia de un
desequilibrio de la secreción hormonal (por ejemplo, estrógeno/progesterona),
algunas más se generan por la inhibición o la ausencia de un mediador o
secreción de sustancias intermediarias (por ejemplo, insulina en la diabetes) o
de su recaptación acelerada (por ejemplo, concentraciones bajas de serotonina
en la depresión) o, justo lo contrario,
el aumento de la estimulación repetida por un aporte exagerado de mediadores
(por ejemplo, hormona tiroidea en la disfunción hipertiroidea).
·
Las Homotoxonas
Con este término se
designan los
productos resultantes de las combinaciones de homotoxinas entre sí, o de
homotoxinas con otras sustancias (por ejemplo, metabolitos), proceso con el cual
se logra neutralizar las propiedades tóxicas de las homotoxinas, obteniendose
así una nueva sustancia no tóxica. El mejor ejemplo de estos procesos tiene
lugar en el hígado, en donde se unen las homotoxinas y los productos
metabólicos para detoxicar el organismo. Otro ejemplo es: Amoniaco más el Ácido Carbónico lo que reacciona
como Urea
( NH3 + CO3H4= UREA).
Es importante dejar claro que la función principal
de la medicina antihomotoxica es favorecer la formación de Homotoxonas. Esto se
logra con los medicamentos biológicos (Homotoxicológicos) con los cuales se
inicia, acelera y fomenta la formación de Homotoxonas y su respectiva
eliminación.
También reciben el nombre de “tóxicos
residuales”. Son los depósitos de homotoxinas con sustancias endógenas, que no
pueden eliminarse mediante las fases de
excreción o inflamación. Estas aparecen cuando el organismo no logra producir Homotoxonas favorables. El ejemplo
típico es la glucosilación no enzimática de los tejidos y superficies celulares
en caso de exceso de glucosa, así como en la diabetes mellitus latente.
Matriz Extracelular (MEC), es el espacio donde se encuentran suspendidas
las células. La MEC, ha sido poco valorada por la medicina farmacológica
convencional, ya que solo se le ha
considerado como tejido de sostén; pero se ha encontrado que paralelamente es
el espacio virtual donde se produce la mayor parte de las interacciones entre
los sistemas de regulación, es decir, es un sistema de comunicación
omnidireccional entre todos los tejidos del organismo humano. A demás está claro que es el lugar donde se depositan la mayor cantidad
de toxinas, lo que genera un medio ambiente toxico para las células, y podría conducir, posteriormente a cambios
celulares degenerativos y factiblemente al cáncer.
La matriz
extracelular es una zona de transmisión y recepción de información entre todos
los sistemas reguladores y la célula. Los nervios, los capilares, los vasos
linfáticos...etc. todos ellos finalizan o comienzan en la MEC. Ninguno de ellos
finaliza ni se origina en la célula. Las interacciones entre los diferentes
sistemas (sistema nervioso, torrente sanguíneo, sistema de defensa, estructura
basal...) tienen lugar en los intercambios de los mediadores muy diferenciados
que se encuentran en la matriz extracelular (MEC). De esta forma la célula se
relaciona directamente con la matriz extracelular, y la calidad de la función y
sus capacidades dependen de la pureza de la matriz MEC.
·
La Matrix Viviente
La histología
moderna denomina actualmente con el nombre de Matriz Viviente (MV), al hecho
histológico para el cual Bernard abrió las puertas.
El histólogo y
fisiologó francés Claude Bernard quien es considerado el padre de la medicina
experimental, en el siglo XIX elaboró el concepto de “terreno interno” o medio
interno. Se estaba refiriendo con este, al entorno directo de la célula, tanto
estructural como fisiológico. Hoy está claro que la calidad de vida de la
célula se relaciona directamente con la pureza de su entorno directo, porque
ésta es la zona de la que toma su alimento y su energía y en la que deposita
sus productos de desecho (ver matriz extracelular). Incluso Louis Pasteur, químico y biólogo
francés, descubridor de los
microorganismos en medicina y fundador de la ciencia de la microbiología, mencionó (refiriéndose a Bernard) que una infección
bacteriana está más relacionada con una modificación del medio interno del
paciente que con la presencia de una bacteria o de otro microorganismo.
La matriz viviente está formada por tres niveles de matriz que se
unen entre sí, estas son:
-la
matriz extracelular
-la
matriz intracelular
-la
matriz intranuclear.
Además de haber interacciones mediante impulsos
migratorios informacionales, señales eléctricas e intercambios de mediadores en
todos los niveles de la matriz, los tres niveles interactúan entre sí y se
influyen mutuamente. Esto significa que cualquier alteración de la regulación
que se produzca fuera de la célula (en la matriz extracelular) podría tener una
consecuencia intracelular o incluso intranuclear, y viceversa. Aunque esté
formada por tres niveles diferentes, la matriz viviente es un sistema
interactivo coherente en intercambio constante de información y energía.
·
El sistema de la gran defensa
El sistema de la gran defensa es el
mecanismo estratégico que utiliza el organismo para neutralizar las homotoxinas
que entran al organismo; está compuesto por cinco subsistemas relacionados
entre sí y que al activarse juntos potencian sus respuestas ofensivas contra la
toxina. Estos a saber son:
1.- Sistema retículo endotelial: formación de
anticuerpos y depósito de toxinas.
2.- Mecanismo
Adenohipofisario-corticosuprarrenal: estimulación e inhibición de la inflamación.
3.- Sistema neural reflejo: Síndrome de
excitación o irritación.
4.- Función detoxicante del hígado: neutralización
de ácidos y toxinas con acoplamiento de homotoxonas.
5.-Función detoxicante del tejido conjuntivo:
función
defensiva de leucocitos –linfocitos, macrófagos-, inflamación, reacción
antígeno-anticuerpo.
Como se puede observar éste es un pilar fundamental, puesto que la
homotoxicología con su terapia lo que pretende es la autocuración; es decir
estimular al organismo para que con sus mecanismos de defensa, tome las riendas
de la situación – si todavía es posible-, de modo que sea nuestra propia
energía e información vital la que restablezca el orden alterado.
La homotoxicología a través de sus
diferentes estrategias trata de aumentar la capacidad y respuesta de cada uno de los mecanismos de la
gran defensa.
·
La regulación
basal
Se entiende por regulación basal las
posibilidades de regulación local del sistema básico unido a los sistemas
superiores de regulación nervioso, hormonal y humoral. El sistema básico está
formado por la sustancia básica (matriz extracelular) y
componentes celulares, humorales y nerviosos. El sistema básico también
recibe como sinónimo los términos de sustancia basal, sistema básico de
biorregulación (SBBR), espacio de Pischinger o Sistema de la regulación basal
según Pischinger.
·
Sistema
de regulación basal
El
organismo es un sistema de energía e información selectivamente-abierto, es
decir, ingresa la energía adecuada (por ejemplo, en forma de alimento) y se
debe eliminar la inadecuada. De esta forma es posible mantener un orden
inestable durante un tiempo prolongado (“ciclo vital”), además de un equilibrio
termodinámico.
Como
el espacio extracelular es un elemento previo a las células, éstas sólo pueden
reaccionar en la medida en que son informadas por el espacio extracelular. Por
ello, la estructura dinámica del espacio extracelular y su regulación
(“regulación basal”) es decisiva para la eficacia de las catálisis extra e
intracelular.
·
Homotoxicosis
Es el término empleado en Homotoxicología, para denominar a lo que
comúnmente se le llama enfermedad. La homotoxicosis es un estado
fisiopatológico que se origina tras la acción de las homotoxinas sobre nuestras
células y tejidos. Debido a esto nuestro organismo induce medidas de defensa
con el objetivo de eliminar las homotoxinas y restablecer en la medida de lo
posible, las condiciones fisiológicas.
·
Tabla de las homotoxicosis o de la evolución de la enfermedad
La Tabla de la Evolución de la Enfermedad (previamente
denominada tabla de seis fases) es un instrumento dinámico para evaluar la
evolución de la enfermedad o salud del paciente. Es un instrumento esencial en
el abordaje homotoxicológico. La tabla es muy importante porque dirigirá
nuestra decisión de cómo tratar al paciente y qué medicación es adecuada para
hacerlo de una manera homotoxicológicamente correcta.
Etapas
en la evolución de la enfermedad
Las
etapas de la evolución de la enfermedad se nuclean en tres grandes bloques que
agrupan a su vez a las seis fases de las homotoxicosis:
A- Etapa
humoral
B- Etapa
de matriz
C- Etapa
celular
A) Etapa humoral
En las fases humorales no están
alterados los sistemas intracelulares. El sistema de defensa se halla intacto y
puede eliminar las homotoxinas a través de diferentes vías (exoneración a
través de los emuntorios).
En esta etapa se aúnan dos fases:
1-Fase de excreción
2-Fase de inflamación
B) Etapa matricial o de matriz
En esta etapa, las homotoxinas se
depositan primeramente en el retículo de la matriz extracelular. En una
evolución posterior, se alteran tanto sus componentes estructurales como sus
funciones. En caso de persistir la enfermedad, se produce una sobrecarga y
lesión progresiva de las estructuras intracelulares.
En esta etapa se aúnan dos fases:
3-Fase de depósito
4-Fase de impregnación
C) Etapa celular
En la etapa celular de una enfermedad, los sistemas de la
célula experimentan una destrucción progresiva. El sistema de defensa del
organismo ya no está en condiciones de eliminar por sus propios medios las
toxinas de las células y de la matriz extracelular.
Es típico de estas fases el llamado bloqueo o rigidez de
la regulación.
En esta etapa se aúnan dos fases:
5-Fase de degeneración
6-Fases de desdiferenciación
·
Las seis fases de las homotoxicosis y sus principales características
Según la homotoxicología las enfermedades se pueden clasificar en
seis fases:
1- Fases de
Excreción (subsumida en la etapa humoral):
expulsión de los productos
tóxicos.
No se la puede considerar una fase patológica puesto que
representa al estado de eliminación fisiológica de los productos de desecho que
produce el organismo para su correcto funcionamiento a través de los órganos y
tejidos emuntoriales (orina, heces, sudoración, menstruación, CO2, ácido
láctico, etc.)
2- Fases de Inflamación (subsumida en la etapa
humoral): inicia la limpieza mediante la
activación del sistema de defensa.
En esta fase nos encontramos con la mayoría de las enfermedades
que tradicionalmente terminan en el sufijo “itis” (otitis, conjuntivitis,
3- Fases de
Deposición (subsumida en la etapa matricial
o de matriz): almacenamiento de los productos tóxicos
en el espacio extracelular.
Si a pesar del esfuerzo orgánico por eliminar las homotoxinas, e
incluso si después de producir una fase de inflamación, el organismo no es
capaz de eliminarlas, lo que hará es depositar esos residuos de la forma menos
dañina para nosotros en algún órgano o tejido.
Se forman entonces depósitos tóxicos orgánicos benignos (quistes,
miomas, verrugas, pólipos, colesterol, bocio, depósitos de grasa, etc.).
Corte biológico:
Es
una
línea de separación imaginaria entre la 3ª y 4ª fase (se explica detalladamente
más adelante)
4- Fases de
Impregnación (subsumida en la etapa matricial
o de matriz): el principal efecto de la intoxicación
se hace intracelular. Empieza la lteración de los sistemas enzimáticos.
En esta fase las homotoxinas no solo se depositan sino que se
introducen en el interior de las células produciendo daños en los sistemas
enzimáticos y estructuras celulares. En esta fase se produce una alteración de
las funciones de las membranas celulares. Dos ejemplos nos permitirán entender lo que esto quiere decir: No es lo
mismo tener una bronquitis que tener asma; o no es lo mismo tener una gastritis
(irritación de la mucosa gástrica por un exceso de ácidos) que tener una úlcera
gástrica (lesión o herida de la mucosa estomacal).
5- Fases de
Degeneración (subsumida en la etapa celular): la
intoxicación destruye la célula.
En esta fase la destrucción o alteración de las estructuras
celulares por causa de la acumulación de homotoxinas es todavía más profunda.
Ahora no solo se afectan las membranas celulares, sino a también las funciones
intracelulares. Aquí entrarían enfermedades como: cirrosis hepática,
tuberculosis pulmonar, lupus, nefrosis, distrofia muscular, trastornos
esquizoides, infarto de miocardio, etc.).
6-Fases de
desdiferenciación (subsumida en la etapa celular): Se caracterizan por la generación de
formas celulares indiferenciadas y no especializas. Al final de esta fase se
originan las enfermedades malignas.
Se produce cuando las homotoxinas consiguen
atravesar la membrana del núcleo de la célula. Produciéndose alteraciones del
material genético del núcleo, un crecimiento incontrolado del tejido
afectado, y finalmente neoplasia o
cáncer. La desdiferenciación es lo contrario al proceso de diferenciación que
se da en las células embrionarias.
·
Corte biológico
El corte biológico es la
línea de separación imaginaria situada entre las fases de deposición
(3) y las de impregnación (4), fases que son subsumidas
en la etapa matricial o de matriz.
Separa la acumulación de homotoxinas en la matriz extracelular de la
incorporación de agentes nocivos a la matriz intracelular con la grave
repercusión de afectar los componentes estructurales de la misma. Mientras que
en la fase de deposición aún es posible la eliminación simple de las toxinas,
en la fase de impregnación tienen lugar crecientes alteraciones estructurales y
funcionales. Con ello se dificulta la eliminación espontánea endógena de las
homotoxinas.
·
Las
Vicariaciones
El concepto de “vicariación” hace
referencia al cambio de los síntomas que presenta un paciente, sea este hacia
la enfermedad o hacia la salud.
Es un término
que se acuño en los principios de la homotoxicología y que fue remplazado por
el de evolución de la enfermedad o
evolución de la salud debido
a que su etimología no explicaba nada de lo que ocurría realmente en el
organismo.
·
Evolución
de la enfermedad o evolución de la salud
Cuando las homotoxinas penetran en el
organismo comienzan a producirse una serie de efectos defensivos intrínsecos en
un intento de neutralizarlas.
En un primer estadio el organismo
creara una fase de excreción pero si esta fracasa, generara una fase de
inflamación y así sucesivamente generará fases de deposición, impregnación,
degeneración y/o desdiferenciación.
El paso del sistema reaccional del
organismo de una fase a otra se ha denominado Vicariación. Lo cual no es
más que el proceso evolutivo hacia la enfermedad o hacia la salud.
Vicariaciones
progresivas o evolución hacia la enfermedad
Es cuando el paso de toxinas se realiza
de una fase menos peligrosa a otra más peligrosa y por tanto el estado del paciente va
empeorando.
El sentido de la Vicariación
progresiva se representa en la tabla de
las fases con una flecha hacia la derecha.
Vicariaciones
regresivas o evolución hacia la salud
Es cuando el paso de toxinas se realiza
de una fase más peligrosa a otra menos peligrosa por tanto la enfermedad va mejorando.
El sentido de la Vicariación regresiva
se representa en la tabla de las fases con una flecha hacia la izquierda.
Vicariaciones
en diagonal
Es cuando las toxinas pasan de un
tejido a otro (de la piel al pulmón por ejemplo) la dirección de la evolución
tendrá una forma en diagonal dentro
de la tabla de las fases de la enfermedad esto es a lo que se le llama vicariación
o evolución en diagonal.
Es así que:
8/12
1- Cuando
la enfermedad evoluciona de los órganos internos a los externos (por ejemplo de
pulmón a piel) es un buen pronóstico.
2- Cuando
la enfermedad evoluciona de los órganos más externos a los internos (por
ejemplo de piel a pulmón) no es un pronóstico tan favorable.
Es muy importante comprender todo lo anterior
porque es la clave para hacer frente a las diversas posibilidades patológicas que
aquejan al hombre. Si no sabemos tratar las enfermedades de forma natural o biológica
y lo que hacemos es suprimir síntomas con medicamentos supresores, iremos
pasando de una fase simple a otra más compleja hasta llegar a una enfermedad
crónica o a la muerte. Si, por el contrario, aunque estemos en una fase
celular, empezamos un tratamiento natural biológico, dependiendo de la
vitalidad, circunstancias, edad, ambiente, capacidad de reacción, genética,
etc. habrá posibilidades de que la vicariación sea regresiva, y se dé una evolución hacía la salud.
Escrito elaborado por: Helmuth H. Medina Bolaño
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